La selva del Dairén es una gran región localizada en las aéreas limítrofes entre Panamá y Colombia. La selva abarca toda la provincia panameña del Dairén, los distritos de Chimán y este de Chepo. La parte colombiana llega a los departamentos de Chocó y Antioquia.
La selva también conocida como el Tapón de Dairén, y ha sido considerada una barrera natural entre ambos países, dado que no existe una vía terrestre oficial que comunique ambos extremos de la selva, de hecho del Tapón de Dairén es donde se interrumpe la carretera Panamericana, la cual une diversos países del continente.
Fuente: Viajeros Blog
Muchas son las teorías de política internacional a cerca de porque, aún en la actualidad y con las grandes facilidades tecnológicas existentes, no existe todavía una vía de comunicación entre ambos externos. Sin embargo para muchos, la apertura de una vía terrestre podría afectar a la conservación de la gran biodiversidad de la selva, suponiendo un riesgo medioambiental.
Una de las aventuras que deciden emprender muchos viajeros el cruzar la selva con los medios tradicionales que se encuentran en su interior.
Para aquellos que deciden cruzarla tienen dos opciones: la aérea o la terrestre-marítima. La opción más atractiva para los viajeros es la segunda. Sin embargo es recomendable hacerlo en grupo, usando buses públicos y oficiales, y siendo claro a la hora de negociar los traslados en embarcaciones y los destinos.
Siguiendo con los objetivos de conservación, el gobierno panameño declaro la zona como Parque Nacional del Dairén, el cual fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en el año 1981 y dos años después paso a ser Reserva de la Biosfera.
Razones no faltan para que la selva haya adquirido ambos distintivos. Dentro de ella podemos encontrar puntos de una gran belleza paisajística gracias a la biodiversidad de su flora y fauna e un ecosistema en el que conviven tanto jaguares como águilas, pumas o monos, y cuatro grupos de etnias indígenas. La selva también cuenta con impresionantes zonas altas como la Serranía del Dairén o la Cordillera de Jurado con alturas de hasta 1875.
Sin embargo uno de los principales atractivos de la selva es su riqueza de a vez. El Centro Ambiental o la Estación Científica Cana son espacios accesibles al público y desde los cuales es posible observar y estudiar ejemplares tan atractivos y coloridos como los guacamayos, tucanes o loros.
Desde 1983 en la selva existen dos Reservas de Indígenas Emberá, nativos que viven en la rolla de los ríos, y que gracias a la ley, tienen el derecho de conservar sus tradiciones como pintarse utilizando pigmentos para su piel, la caza y la pesca.
Fuente: Viajeros Blog
A pesar de toda su belleza la Selva del Dairén la ONU ha alertado que la selva se encuentra en peligro por abandono institucional. Durante algunos años, y debido a su poca comunicación con el exterior, la selva fue el punto de encuentro entre traficantes, y delincuentes. Es por ello que la Organización Mundial de las Naciones Unidas pide una mayor presencia del estado desde el año 2015.
La conservación de este entorno ha de ser el principal punto de atención, y ello también implica un mínimo de presencia del estado para que, tanto a nivel social como natural, la Selva de Dairén siga siendo un entorno idílico para los aventureros experimentados.