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Estas son las pirámides Mayas que tienes que ver en México.

México, cuna del imperio Maya, es un destino que deslumbra al visitante ante la gran cantidad de recursos históricos fruto de su época imperial. Es uno de las países que cuanta con un mayor numero de ruinas, excavaciones  y zonas arqueológicas.

Todos estos monumentos despiertan un gran interés en cualquier visititante, debido a su arquitectura peculiar, su grandeza, y la gran historia que guardan sus muros. Pero su belleza aumenta gracias al entorno natural en el que se encuentran, la flora y fauna selvática que rodean las pirámides mayas, hacen que se conviertan en un destino aventurero.

Chiapas, Yucatán o Quintana Roo son las provincias mexicanas que albergan la mayoría de las ruinas mayas en mejor estado del país, las mas atractivas para el visitante pues algunas de ellas se abren paso entre la frondosa flora selvática que las ha invadido con el paso del tiempo

 

 Pirámide de Kukulcán

Chichén-Itzá es el recinto arqueológico más importante de la Riviera Maya, las ruinas han sido declaradas patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, Y una de Las Siete Nuevas Maravillas del Mundo. El yacimiento de Chichén-Itzá se localiza en la península de Yucatán, a dos horas de Cancún y 3 horas de Playa del Carmen.

El Templo de los Guerreros, El Observatorio, El Cenote Sagrado, El Juego de Pelota son algunos de los templos más destacados, aunque no hay dudas que el Templo Kukulcán es el que más llama la atención.

La arquitectura de este edificio fue pensada para proyectar luces y sobras sobre diferentes lugares ya predeterminados por el calendario maya. En cada amanecer y crepúsculo de primavera y otoño la esquina de la pirámide proyecta la sombra de una serpiente (Kukulmán).

Chichén-Itzá fue una antigua ciudad cuyas fechas de construcción son aún desconocidas. Sin embargo, si se sabe que Chichén-Itzá era un punto religioso para los mayas, de echo, en la actualidad, la ciudad sigue siendo un lugar sagrado para los nativos de la provincia, además de un destino de peregrinación.

 

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Templo de las inscripciones de Palenque

Palenque es una antigua ciudad cuyo origen se remota al a año 226 a.C. La actual zona arqueológica de Palenque abarca 2,4 km2 de  extensión, que se dice que esto es solo un 10% de la extensión total de la ciudad original, se cree que el resto se encuentra cubierto por la selva.

La época estrella de Palenque fue en el siglo VII, uno de los templos más llamativos es El Templo de las inscripciones de Palenque, clasificado en la lista de Monumentos que representan el universo. Si bien Kukulmán era un templo relacionado con el sol, elemento esencial en la cultura maya; El templo de las inscripciones de Palenque se relaciona con el universo. Estos monumentos querían representar cerros o montes, elementos que guardaban un estrecho significado con el origen-fruto de los alimentos.

Palenque se encuentra en el estado de Chiapas, localización de algunos de los proyectos de Voluntariado de Cooperating Volunteers. Un entorno idílico, declarado Patrimonio de la Humanidad en  1978.

 

 

Pirámide del sol y Pirámide de la luna de Teotihuacán

Situada a 2300 metros sobre el nivel del mar, localizada a unos 50 kilómetros de Ciudad de México se encuentran las ruinas de la ciudad de Teotihuacán. Se comenzó a construir en el siglo III a.C., y fue una de las ciudades más importantes de México, principalmente en ente los siglos I-II d.C. De entre las ruinas de esta ciudad destacan dos principales pirámides: Las pirámides del Sol y la Luna.

La Pirámide del Sol tiene una altura de 70 metros, lo que la convierte en la tercera más grande del mundo después de Keops y Cholula. La arquitectura da una orientación especial a esta pirámide de manera que el 21 de Junio el sol se oculta justo en frente de la pirámide; siendo la pirámide un reloj solar.

La Pirámide de la Luna es de menores dimensiones, pero de altura similar. Delante de la pirámide encontramos la Plaza de la Luna, junto con otros 12 templos, un total de 13 templos que suponen un numero muy importante para el computo de los días en el calendario maya. A diferencia de la pirámide del Sol, el acceso a la cima de esta segunda pirámide no es posible, sin embargo las vistas que ofrece desde son espectaculares.

 

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