Perú, un país ubicado en la parte occidental de América del Sur, conocido por su rica historia, diversidad cultural, y una naturaleza impresionante que incluye montañas, selvas, desiertos y costas. Es el hogar de antiguas civilizaciones como los Incas y otras culturas precolombinas, lo que lo convierte en un destino fascinante para los amantes de la historia y la aventura.
Si lo eliges como destino para vivir tu experiencia de voluntariado, podrás disfrutar de este país en su esplendor y visitar sus lugares imprescindibles como: Machu Pichu (ya os contamos su historia en una entrada anterior en el blog), Lago Ticitaca, Líneas de Nazca, Selva Amazónica…
Por eso hoy os queremos hablar de una de las montañas más famosas y peculiares del mundo, la montaña de los 7 colores conocida localmente como Vinicunca o Cerro Colorado. Esta maravilla natural está ubicada en el distrito de Pitumarca, provincia de Canchis, en los Andes peruanos, en la región de Cusco donde tenemos diferentes programas: cuidado de niños/as, programa de enseñanza y refuerzo, apoyo a comedor social de la comunidad, enseñanza tipo Montessori, empoderamiento de mujeres y adolescentes…
Será un viaje con propósito inolvidable, combinando horas de apoyo a equipos locales en los diferentes proyectos con turismo responsable para descubrir las diferentes joyas.
Esta montaña se encuentra a una altitud de 5.200 metros sobre el nivel del mar, por lo tanto subir lo convierte en un absoluto desafío para los viajeros/as, pero vale totalmente la pena y es famosa por su llamativa apariencia multicolor que se debe a la composición de distintos minerales que forman las capas de la superficie, combinando tonos rojizos, amarillos, blancos y marrones entre otros, y también debido a procesos geológicos de sedimentación y erosión durante millones de años.
Las diferentes tonalidades corresponden a minerales como: óxidos de hierro, sulfatos de cobre, arsenicas con óxido de azufre y arsencicas ricas en cuarzo, y rocas magmáticas y compuestos de manganeso. El fenómeno que ha revelado estos colores es relativamente reciente, ya que el deshielo de glaciares en la zona permitió que las capas multicolores salieran a la luz.
Desde Cusco hay aproximadamente 100 kilómetros de distancia al sureste de la ciudad y se pueden organizar diferentes tours como trekking de distintos niveles, para poder realizar estas excursiones sin ponernos en riesgo, se recomienda pasar 2-3 días en Cusco y zonas altas o similares para aclimatarse.
Es imporante la ropa abrigada por capas, crema solar, pastillas para el mal de altura, gafas de sol y sombrero ya que los rayos de sol inciden directamente, y por supuesto calzado adecuado para la excursión. Durante el día, el sol es intenso, y las lluvias son comunes en temporada húmeda. La temporada ideal para visitar este lugar mágico suele ser de mayo a octubre.
Un dato curioso es lo común que es ver llamas y alpacas durante el camino, ya que las comunidades locales quechuas los crían.
Por eso visitar esta montaña de arcoíris, hará que sea una experiencia única.
¿NOS VEMOS EN PERÚ?