Brasil y Argentina, dos países para hacer voluntariado en Sudamérica
Si echamos un vistazo a los países en vías de desarrollo que hay a lo largo y ancho del planeta, podremos observar que en todos los continentes existen necesidades muy concretas. Y es que, por desgracia, son muy pocos los rincones del mundo los que se libran de las desigualdades y de las lacras sociales y económicas.
Uno de estos ejemplos es el que podemos encontrar en Sudamérica. En el cono sur del continente americano encontramos una tierra que solo se puede definir como un lugar en el que los contrastes son una constante.
Dos países en los que poder ser voluntario
Aunque en esta zona de la Tierra existen muchos lugares con sendos programas de voluntariado internacional, hay que decir que en Brasil y Argentina podemos encontrar algunos realmente interesantes.
A pesar de ser dos países desarrollados nos encontramos con algunas situaciones nada agradable en algunos reductos muy concretos. Unos enclaves para los que se han diseñado unos conjuntos de acciones que tienen como objetivo revertir una situación que, dicho sea de paso, no tiene una solución sencilla en ninguno de los casos.
¿Qué se puede hacer en Argentina?
Hay que decir que Argentina es uno de las naciones de este lugar del continente americano que más tradición y cultura encierra. Extendiéndose desde el trópico de Capricornio hasta el norte del Cabo de Hornos, nos podemos encontrar un país en el que los grandes contrastes son más que habituales.
Pues bien, todo esto que podría ser beneficioso desde todo punto de vista no hace otra cosa que entorpecer un desarrollo en algunos lugares de este país. De hecho, aunque pueda parecer una contradicción, los programas de los que vamos a hablar a continuación tienen lugar en Buenos Aires y en Bariloche.
- Programa de jóvenes en riesgo social. Argentina siempre ha sido una de las naciones más ricas de esta zona del mundo. Sin embargo, la mala gestión de la clase política allá por los años 2001 y 2002 hizo que el país cayera en una gran depresión a todos los niveles. Una depresión que no hizo otra cosa que sumir en una gran exclusión social a los más desfavorecidos que por aquel entonces no eran otros que los más jóvenes. Un segmento de la sociedad sobre el que hay que trabajar a través de la educación y de la formación.
- Rescate animal. El estado de la fauna argentina puede ser todo un problema. Es por ello por lo que se han diseñado programas en los que se cuidan algunas especies muy concretas de algunos ecosistemas que se encuentran en serio peligro. Unos programas, eso sí, que están formados por personas que tienen que tener una cierta cualificación.
- Salud y medicina. Como no podía ser de otro modo, cuando en un país encontramos problemas sociales y económicos, todo lo que tiene que ver con la salud termina por resentirse. De ahí la importancia de crear programas enfocados a establecer algunas medidas sanitarias que en otras naciones podemos considerar como básicas. Entre estas medidas podemos encontrar algunas como la higiene, el uso de antibióticos o el uso de las vacunas con la intención de erradicar algunas enfermedades que allí pueden ser mortales.
No obstante, hay que dejar bien claro que estos son solo algunos ejemplos. En función de la zona y de lo que estemos interesados en hacer, se pueden encontrar otros programas que pueden ser muy atractivos y muy útiles.
Hay que tener en cuenta que en algunos barrios muy deprimidos de Buenos Aires y de Bariloche los programas que tienen no se solucionan con una acción esporádica. De lo que se trata es de ofrecer un trabajo continuo con el objetivo no solo de poner freno a esas desigualdades sino a prevenirlas en un futuro.
¿Cómo se puede ayudar en Brasil?
Desde el punto de vista de una persona que no conozca la situación se puede pensar que Brasil es un país privilegiado. Con una flora y una fauna sin igual, sin embargo, nos topamos con una nación que tiene serios problemas en algunos casos.
Uno de esos casos es el de Curitiba. Un lugar en el que se han detectado problemas que van desde la sanidad a la educación pasando por la protección de un hábitat que allí es fundamental para poder alcanzar una buena calidad de vida.
- Programas enfocados a las infraestructuras. Todo lo que tiene que ver con las infraestructuras siempre es algo vital para la población de este lugar brasileño. Más que nada porque si atendemos al clima que tienen allí, nos topamos con un entorno en el que las lluvias torrenciales y las tormentas tropicales son una constante. Es por ello por lo que el hecho de poder construir viviendas que soporten estos avatares se hace tan necesario.
- Programas de defensa de la vida salvaje. Si por algo se caracteriza el ser humano es por no saber tratar, en numerosos casos, todo lo que tiene que ver con la vida natural. No en vano la flora y la fauna de Curitiba se ha visto afectada de una manera extraordinaria en las últimas décadas. Este hecho hace que existan muchos programas de voluntariado internacional que tengan como objetivo la reforestación del lugar y el cuidado de algunas especies que son vitales para el porvenir de la zona.
Ni que decir tiene que tras haber expuesto estos problemas podemos asegurar que la necesidad de voluntarios es imperiosa. Unos voluntarios que tienen que estar implicados ya que no serán pocas las ocasiones en las que el desánimo y la frustración hagan acto de presencia.
Sin embargo también hay que dejar bien claro que esta es una experiencia que encierra un elevado grado de satisfacción ya que el hecho de recuperar la vida en un lugar como este supone mucho en cuanto a experiencia persona se refiere.