COMIDA TÍPICA DE SENEGAL

Ya os contamos algunos imprescindibles para visitar en Senegal si lo eliges como destino para vivir tu experiencia de voluntariado, y como gran amantes de la comida, no podemos quedarnos atrás recomendando algunos de los platos que debes probar si viajas a este destino.

La comida en Senegal es muy variada y está profundamente influenciada por la cultura, el clima y la historia del país. Al ser un país costero, algunos de sus ingredientes básicos son el pescado, y se suelen acompañar con arroz, mijo, cacahuetes, verduras y muchas frutas tropicales.

Estos son algunos de los platos típicos que encontrarás por sus calles y en restaurantes: 

  • THIEBOUDIENNE (CEEBU JËN)

Es uno de los platos más icónicos de Senegal y se considera el plato nacional del país. Es una comida muy sabrosa, preparada en una sola olla, tradicionalmente compuesta de pescado, arroz y verduras. Este plato refleja el rico patrimonio culinario de Senegal, combinando ingredientes locales con influencias de otras culturas.

Generalmente se usa pescado fresco marinado en hierbas y especias, como la yassa (mezcla de ajo, cebolla, y mostaza), se acompaña generalmente con arroz blanco aunque a veces se utiliza una variante, el arroz rojo. Las verduras también suelen ser variadas y podemos encontrar, zanahorias, repollo, berenjena, yuca y mandioca. Por último también una salasa de tomate que le da su característico color rojizo y un sabor profundo y delicioso y especias como el perejil, ajo, cebolla, pimientos, y a veces se añaden chiles para darle un toque picante.

El pescado se marina y luego se fríe o se cocina al vapor, antes de ser guisado con verduras y salsa de tomate. Todo se cocina junto con el arroz para que absorba los sabores del caldo de pescado y las especias, resultando en un plato muy aromático y completo.

Es el plato estrella ya que cuenta la historia de Senegal combinando ingredientes marinos, agrícolas y técnicas culinarias locales.

  • YASSA

Otro plato tradicional muy popular en Senegal y en otras partes de África Occidental, como Guinea y Mali. Es conocido por su sabor intenso y su salsa a base de cebolla, limón y mostaza. Aunque la versión más famosa es el yassa de pollo (yassa poulet), también se puede preparar con pescado o carne de res.

Los ingredientes principales son la proteína elegida que es marinada durante horas en una mezcla de zumo de limón, cebolla, ajo y mostaza. Se usa abundante cebolla ya que le da al plato una textura y sabor característico. Por otro lado el zumo de limón aporta un toque ácido y refrescante, como la mostaza que también le añade un picante suave.

Los ajos y los pimientos realzan el sabor del plato, y en ocasiones se le añade aceitunas que también le dan un toque especial.

Como en la mayoría de platos, se usa arroz como acompañamiento que al mezclar con la salsa crea un sabor delicioso.

Después de marinar el pollo, ternera o pescado, se doran y se retiran. También se marinan las cebollas y se cocinan lentamente hasta que se caramelizan y se vuelven suaves. 

El plato se cocina a fuego lento con agua o caldo, lo que permite que todos los sabores se combinen perfectamente. Finalmente, se sirve con arroz blanco y se convierte en un plato muy sabroso con variedad de sabores. Es un plato simple pero muy apreciado.

  • MAFÉ

Este plato no es solo emblemático en Senegal, también en la cocina de otros países como Mali, Gambia y Guinea. Es conocido también como ‘salsa de cacahuete’, ya que es un guiso espeso hacho a base de crema o pasta de este fruto seco que le da un sabor rico y cremoso. Tradicionalmente se prepara con carne, aunque también puede hacerse con pollo, pescado o incluso de manera vegetariana.

Consiste en la proteína elegida (ternera, cordero, pollo o pescado), la pasta de cacahuete y también gran variedad de vegetales como la batata, zanahoria, calabaza, repollo y yuca. También se elabora con una salsa o paste de tomate que es la que aporta el toque ácido y color al guiso. De especias se usa el jengibre, ajo, cebolla, pimientos y a veces guindilla para el toque picante. Y por supuesto se acompaña con arroz o con cuscús.

Se doran los trozos de carne en una olla grande con un poco de aceite, para sellarlos y darles sabor. Se añaden las cebollas, el ajo y las especias para sofreírlas junto con la carne. Luego se mezcla la pasta de cacahuate con agua o caldo y se agrega a la olla, junto con la pasta de tomate, para crear la salsa espesa y se deja cocinar a fuego lento, añadiendo las verduras para que se ablanden y absorban el sabor del guiso. Todo se cuece hasta que la carne esté tierna y las verduras bien cocidas.

El mafé se sirve caliente y es un plato reconfortante y nutritivo, con una combinación perfecta de sabores dulces, salados y ligeramente picantes. El cacahuate le otorga una riqueza única que lo hace popular en toda la región. 

  • THIAKRY

También conocido como “déguê” en algunas regiones, es un postre tradicional, un plato dulce y cremoso a base de cuscús o granos de mijo mezclado con productos lácteos, que puede servirse frío, lo que lo hace refrescante y perfecto para climas cálidos.

En la versión tradicional, se utiliza mijo, pero el cuscús es común en versiones más modernas. Se le añade yogur o suero de leche que le da una textura cremosa y refrescante. En algunas versiones también se usa leche condensada o crema. Se añade azúcar para darle dulzor, aunque la cantidad puede variar según el gusto y esencias como vainilla, agua de azahar o agua de rosas, para aromatizar el postre. En ocasiones se añaden pasas, nueces u otros frutos secos que aportan textura y sabor adicional.

El cuscús o mijo se cuece según las indicaciones, generalmente al vapor o hervido, y se deja enfriar. Una vez frío, el cuscús o mijo se mezcla con yogur natural o suero de leche se endulza con azúcar al gusto y se aromatiza y se enfría antes de servir.

Este postre es muy popular en celebraciones y ocasiones especiales, aunque también se consume cotidianamente debido a su simplicidad y frescura. 

  • NDAMBÉ

El ndambé es un plato típico especialmente popular en la región de Casamance. Se trata de un guiso a base de pescado, mariscos o carne, cocinado con una mezcla de especias y acompañado generalmente de arroz o yuca. 

Pueden utilizarse diferentes tipos de pescado (como el mero) o también carne (pollo o carne de ternera). Se le añaden verduras variadas entre ellas; tomate, cebollas, pimientos y en ocasiones hojas de mostaza o espinacas. Todo ello se sazona con ajo, jengibre, pimienta negra y una mezcla de especias locales. Para cocinarlo se usa aceite de palma que le da un sabor característico, y este plato, también se acompaña con arroz o con fufu que es un puré de yuca.

El pescado o carne se marina con las especias y se deja reposar para absorber sabores. Se calienta el aceite y se sofríen las cebollas, el ajo y el jengibre. Luego se añaden los tomates y las verduras, cocinándolos hasta que estén tiernos. Se incorpora el pescado o carne y se cocina hasta que esté completamente hecho.

El ndambé puede variar según la región y los ingredientes disponibles, pero la esencia del plato permanece constante.

  • BASSÍ SALTE

Otro plato tradicional de la cocina senegalesa también popular en la región de Casamance. Este plato consiste en una especie de guiso que incluye varios ingredientes y es conocido por su sabor robusto y especiado.

A menudo se utiliza carne de ternera o cordero, aunque también puede hacerse con pollo. En cuánto a verduras; se incluye la cebolla, pimientos, tomates y a veces zanahorias o berenjenas. Comúnmente se sazona con ajo, jengibre, pimentón, y otras especias locales. Y también se cocina con aceite vegetal o aceite de palma, acompañando el plato final con arroz o con pan tradicional, el boul.

Se mezcla la carne con ajo, jengibre, pimentón, sal, y zumo de limón y se deja marinar durante al menos 30 minutos (o varias horas si es posible) para intensificar el sabor. Se calienta el aceite de palma en una olla grande y se agregan las cebollas y se sofríe hasta que estén doradas y fragantes. A continuación se añaden los tomates hasta que se deshacen y forman la salsa. En la olla se incorpora la carne y se sofríe hasta dorarla, agregando zanahorias y berenjenas.

Por último se añade caldo de carne o agua para cubrir los ingredientes y llevarlos a ebullición, luego reduciendo a fuego lento durante 30-40 minutos y se sirve caliente.

Existen variaciones que se preparan con pescado o marisco, y vegetarianas a partir de verduras y legumbres.

Este plato representa la calidez y la hospitalidad de la cultura senegalesa. 

  • LAKH

También conocido como lakh de mil, es popular por su sencillez y riqueza de sabores. Es un guiso a base de arroz que se acompaña con una variedad de ingredientes, entre los que suelen estar las legumbres y las verduras. 

Generalmente, se utiliza arroz de grano largo y las verduras usadas son cebolla, tomates, zanahoria, pimientos, espinacas o hojas de mostaza legumbres como los garbanzos, frijoles o lentejas y en ocasiones se le echa pollo, ternera o pescado. Todo ello se sazona con ajo, jengibre pimentón, sal y pimienta negra. Y también se cocina con aceite de palma.

Se lava el arroz y se cocina en agua con sal, puede ser al vapor o hervido. Por otro lado en una olla con aceite caliente se sofríe la cebolla hasta que esté dorada y se añade tomate picado, pimiento y zanahorias que se cocinan hasta que están tiernas. Las legumbres secas se cocinan por separado y se añaden al guiso, y también el pollo o la carne hasta dorarlos.

Una vez que las verduras y las proteínas estén listas, se mezcla el arroz cocido con el guiso, asegurando que todos los ingredientes están combinados. Se sirve y se acompaña con una salsa picante al lado de chile, con ensalada o con yuca o plátano.

Este plato puede hacerse completamente vegetariano usando solo verduras y legumbres.

  • THÉ (ATAYA)

Es una tradicional bebida de té muy popular y un ritual social que fomenta la convivencia y la hospitalidad

Generalmente se usa té verde fuerte, normalmente importado de China, y se le añade menta, azúcar y evidentemente, agua.

No tiene ningún misterio pero no sólo se considera una bebida, también un momento de estar en compañía en familia, con amigos o para dar hospitalidad a los visitantes. Puede ser un signo de estatus y generosidad.

Podemos encontrar más platos típicos como el Soupou Kandja, fattava, Capitaine à la Saint-Louisenne y varios más. Todos ellos potenciando los ingredientes típicos del país y ofreciendo una experiencia única y diferente a los visitantes.

Viajar también es disfrutar de la gastronomía local.

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